Hola a todos sigo con el diario personal (bueno, estos dos últimos días, semi-presonal) sobre el KDEdu Sprint/Bilbao 2011. Cuarto día.
Domingo 10 de abril
El día más relajado había llegado. He de decir que este día no lo viví en directo, así que lo he reconstruido gracias a los comentarios de diferentes asistentes (gracias a Dani, Aleix y Agustín).
El domingo se inicia con la tradicional desayuno colectivo en el Hotel, donde tengo el «gusto» de despedirme de buena parte de los participantes (digo gusto, porque de otros no pude ni despedirme) y de quedar para siguientes eventos, eso si, ahora los seguiré con mucha más atención vía Internet.
Mientras yo cojo el tranvia a las 9 de la mañana para coger el autobús y tomar el avión de Bilbao a Valencia y después coger el metro y a continuación el tren (una odisea de transportes «públicos») para para llegar a casa a las 14 horas (y comer un excelente arroz al horno…. 🙂 ) los asistentes realizan un breve viaje hasta la sede de Reciclanet para seguir con el encuentro.
El ambiente en Bilbao es muy tranquilo, lo que contrasta con la bulliciosa noche anterior. Lógico. Apenas hay personas en el metro.
A lo largo de la mañana se sigue trabajando en los proyectos relacionados con la educación, los participantes en el Sprint están algo cansado y prefieren preparar su código para compartirlo el último día. Lo cierto, es que llevan muchos días de conversaciones en las comidas y los viajes y ya tienen suficiente material para introducirlo en las aplicaciones.
Las horas pasan y llega el momento de parar para reponer fuerzas. La comida de este domingo se realiza en el Hika Atenea. Una comida con más de 60 comensales con diferentes inquietudes donde los desarrolladores cambiaron un poco sus temas de conversación ya que no todo en la vida son los ordenadores y su software. Buena comida, brindis y risas, buenos momentos que quedan en el recuerdo.
Llega el momento de pasar una tarde lúdica por Bilbao, los partipantes del Sprint que lo desean (casi todos los extranjeros que no conocen la ciudad ) deciden pasear por Bilbao y visitar el Guggenheim, aunque otros están más interesados en continuar su trabajo en Reciclanet. La actividad propuesta, una excursión a la playa, fue anulada, este domingo rompió la racha de días soleados que acompañaba el Sprint.
En fin, un día tranquilo y relajado, previo al final del Sprint.
Por cierto, agradezco a Víctor que tomara tantas instantáneas del evento.