Hola a todos sigo con el diario personal sobre el KDEdu Sprint/Bilbao 2011, llegamos al tercer día.
Sábado 9 de abril
El día empieza con cierto paralelismos con el anterior: desayuno social, viaje a la ETSI (esta vez en el tranvia) y rápida puesta en marcha de los equipos para seguir el trabajo.
Como es habitual el grupo está silencioso, ensimismado en sus correos, listas de noticias, relaciones sociales virtuales y, por supuesto, en el código de programación.
Todos estamos sentado en nuestras mesas de trabajo, como si fuéramos alumnos, sensación que se veía reforzada por la presencia de Javi en la tarima del aula. Se produjo alguna broma al respecto para ir al baño, se le pedía permiso al improvisado profesor.
Mientras cada desarrollador estaba concentrado en sus aplicaciones, Alex trabaja con Elena para seguir puliendo la nueva web de KDE Edu (que como ya expliqué, estará próximamente en sus monitores).
Yo, por mi parte, preparo entradas y, como buen paparazzi, empiezo a organizar las fotografías que me proporcionan Víctor y Alex. También, realizo la excursión obligatoria al bar (no el de la facultad, sino a uno externo) para tomar el café de media mañana. Momento en el cual hablo un poco más con varios asistentes, con lo que practico el inglés. Son de estas conversaciones en momentos distendidos donde aparecen nuevas ideas (fructíferas o no).
Al volver se empieza a analizar los diferentes proyectos del GSOC que el equipo de KDE Edu puede tutorizar. Se habla de los candidatos, de los objetivos, de lo que puede aportar y se abre un espacio de diálogo sobre las ideas generales que deben gobernar KDE Edu. Debo confesar que me perdí un poco pero lo encontré muy interesante.
El tiempo pasa rápido cuando estás enfrascado en tus asuntos, así que la hora de la comida lelga más pronto de lo que deseábamos. Además, por motivos organizativos debemos abandonar la Facultad y trasladar nuestros equipos a un nuevo centro de trabajo, Reciclanet, un lugar que nos sorprenderá a todos.
Nos dirigimos a un bar cercano a la Facultad y recibimos a un nuevo miembro del Sprint, Frederik Gladhorn , desarrollador de Parley.
Tras la comida (social y, como siempre, muy interesante y divertida) cogemos el metro y nos encontramos con Emet, el cual nos acompaña a Reciclanet situado en un edificio lleno de grandes locales (sin llegar a ser naves industriales). Este fue uno de los descubrimientos del día (pero no el único).
Reciclanet es básicamente un lugar donde se reciclan ordenadores “antiguos” instalando sistemas operativos Linux y, posteriormente, se vende a precios verdaderamente aceptables. Una ONG informática que está haciendo y hará un gran papel en la difusión del Software Libre.
Normalmente, los ordenadores “obsoletos” proceden de empresas y, por tanto, suelen ser packs ordenadores clónicos (pude contar un palet con 24 equipos, francamente interesante). De esta forma Reciclanet es una pequeña nave llena de ordenadores bien organizados y en proceso de actualización. Prometo hablar mucho más de esta organización.
En esta ocasión, los desarrolladores se reparten por el aula ya que se dispone de una buena red wifi. Yo por mi parte, me pongo a trabajar con Aleix en un proyecto común, el cual avanza bastante bien. También me guardo para un futuro más entradas sobre el mismo.
Nos acompaña durante toda la tarde los sonidos de una fiesta que hay apenas a unos metros de Reciclanet. Se trata de una fiesta de disfraces organizada por unos tipos muy simpáticos en una de los locales del edificio. Lo cierto es que la marcha que llevan es extraordinaria, su local es como un piso enorme y minimalista, con cocina, comedor, salón con TV de plama y ¡pista de baile incluida!.
Cuando nos disponemos a salir de Reciclanet para ir a cenar y tras una breve negociación por parte de Dani, nos aceptan unos minutos en su fiesta. Creo que fue uno de los momentos más surrealistas de mi vida. Evidentemente, algunos de los integrantes (no diré el nombre para no “dañar” su buen nombre…. fue el gran Tomaz) se puso a bailar como un poseso.
Evidentemente, esto nos retrasó un poco y produjo algo de caos en el grupo, ya que íbamos ya justos de tiempo, pero creo que esta experiencia es la que después se queda permanentemente en l, o memoria colectiva del grupo.
Finalmente, cogemos el metro, volvemos al Hotel y Dani, con la colaboración de los integrantes del grupo de Software Libre Itsas, nos llevan a Restaurante Montenegro, en Enekuri, donde se inicia una excelente cena social, con una comida exquisita (debo hablar de la web Colectivia alguna vez), con grandes temas de conversación, buen vino y buenos postres (aunque sin miel en algún plato, un sacrilegio para alguno de los integrantes del grupo).
Posteriormente, nos dirijimos al mirador Artxanda, donde contemplamos una bonita estampa de la ciudad de Bilbao, un marcianito del Space Invaders y realizamos una buena foto de grupo (por cierto, no tendremos ninguna foto del grupo completo, siempre había algún ausente).
En este momento, algunos de los participantes se retiran al hotel, mientra otros disfrutamos del ambiente tranquilo de un pub bilbaino. Evidentemente, la mayor parte de conversaciones giran alrededor de los temas candentes del SL, con especial atención a su futuro.
Yo aprovecho para hablar con Frederick sobre Parley, mostrándole mi admiración por el programa y prometiéndole reportes sobre su uso con estudiantes.
Lo cierto es que siento el cansancio de todo el día y a la mínima oportunidad, me retiro a mi habitación.
Ha sido un día francamente productivo, donde se han cumplido las expectativas que tenía respecto a este Sprint. Lástima que mañana deba abandonarlo.