Como muchos de vosotros sabréis KDE Blog es un blog personal. No es una decisión que yo haya tomado y que sea inamovible, sino que por circunstancias no he conseguido tener colaboradores que se sumen al proyecto de forma constante. En cierto modo lo comprendo: llevar un blog no está de moda y requiere cierta disciplina. No obstante, siempre encuentro algunos colaboradores puntuales como Rubén Gómez, o Edith Gómez. En esta ocasión de la mano
Javier V os presento «Cuatro motores imperdibles para desarrollar tus propios videojuegos en Linux» donde nos aconsejan una alternativa más que interesante para solucionar un problema que cada vez es menor como es el de jugar en Linux pero que abre puertas a otro tipo de colaboraciones.
Cuatro motores imperdibles para desarrollar tus propios videojuegos en Linux
Una de las cantinelas más populares que todo usuario de Linux recita alguna vez en su vida es la relativa al escaso catálogo de videojuegos que puede funcionar en este sistema operativo, a diferencia de lo que sucede con Windows, donde la lista de juegos nativos resulta abrumadora. Es cierto que a través de recursos como Wine o Cedega es posible poner remedio a esto para poder jugar a un gran número de títulos ajenos, pero se echa de menos que nuestro pingüino favorito disponga de un repertorio propio más numeroso.
No es fácil desarrollar un videojuego desde la raíz, pero tampoco es una tarea imposible. Para ello, el usuario dispone de multitud de herramientas diseñadas precisamente para que incluso los más novatos tengan opción de concebir sus pequeñas grandes obras de entretenimiento. Estos recursos suelen estar pensados para que el proceso de creación sea los más intuitivo y rápido posible, facilitando de de este modo que la desesperanza no tenga cabida en este asunto. A continuación, exponemos el ranking con las mejores plataformas de programación de videojuegos con las que todo iniciado debe dar sus primeros pasos.
- La primera posición es para Game Maker Studio 2. Se trata de un entorno que está pensado para quienes prácticamente no tienen conocimientos sólidos en esto de programar. Su funcionamiento se basa en el arrastre de diferentes iconos sobre una pantalla, encerrando cada uno de ellos una acción determinada del juego, ya sea en forma de personajes, movimientos, elementos de ambientación, etcétera. Por medio de esta estructura, el usuario va conformando su propio escenario en dos dimensiones. Ahora bien, Game Maker también dispone de una modalidad para experimentados, donde es posible utilizar lenguajes de programación como C++ o Java. Uno de sus puntos fuertes es que la web incorpora un extenso abanico de tutoriales y un foro desde el que poder comentar cualquier asunto relacionado con la plataforma.
- También Unity está dentro de la lista. Este motor nace con la idea de cubrir las necesidades de aquellos desarrolladores independientes que no disponen de recursos económicos pero sí saben moverse en lenguajes como C++ y C#3?. De hecho, su licencia es gratuita para quienes ganen menos de 75 mil euros al año. Unity permite una construcción mucho más avanzada, puesto que trae consigo herramientas gráficas tridimensionales, mapeados de primer nivel y un soporte tan sólido como es Nvidia. Dentro de sus especialidades destaca el desarrollo de juegos de azar, ya sea para una plataforma online, un videojuego tradicional o un casino app que albergue contenido para máquinas tragamonedas, poker o ruleta. No en vano, este tipo de espacios para el entretenimiento es de los más populares, ya que permite ofrecer sesiones interactivas en tiempo real. Unity está dotado de un editor gráfico que incide de manera directa en la recreación minuciosa de salas de casino en 3D, gracias sobre todo a recursos como Photoshop, Maya y 3ds Max, que acentúan el soporte visual necesario para un juego de estas características.
- El tercer puesto es para el impronunciable OHRRPGCE (Official Hamster Republic Role Playing Game Construction Engine). En este caso, nos topamos con un motor de videojuegos especialmente pensado para la creación de multiplataformas de rol en 2D. Su encanto radica en que cualquiera puede ponerse al frente del desarrollo de una aventura gráfica sin necesidad de saber absolutamente nada sobre programación, y es que utiliza secuencias de comandos basados en su propio lenguaje. Además, es de código abierto e incluye un editor cargado de funcionalidades. Los amantes de los 8 bits tienen aquí su oportunidad.
- Finalmente, nos centramos en Game Editor, la plataforma nacida en 2002 de la mano de Makslane Rodrigues para la creación de videojuegos en dos dimensiones. Esta utiliza código abierto, por lo que el usuario puede modelarlo a su antojo para ajustarlo a sus pretensiones. La interfaz de Game Editor no entraña mucha dificultad; básicamente despliega un menú de ventanas en las que se van alojando las diferentes acciones y variables del juego. Los desarrolladores pueden ir creando contenido a partir de un lenguaje de secuencia de comandos que guarda cierto parecido con la programación C. Además, permite colorear la sintaxis para que todo resulte menos caótico.
En definitiva, más allá del nivel de formación que uno tenga, como hemos visto, cabe la posibilidad de atajar la sequía de juegos en Linux de manera directa. La fórmula es la autocreación, el trabajo y la perseverancia. Las herramientas que os hemos propuesto se encargan del resto.