El Plasmoide Mycroft recibe sus primeras actualizaciones

Hace unos días hablé de la aproximación del proyecto Mycroft al mundo KDE. Parece ser que esto no va a ser flor de un día ya el plasmoide Mycroft recibe sus primeras actualizaciones de la mano de su desarrollador principal. Conozcamos los detalles.

El Plasmoide Mycroft recibe sus primeras actualizaciones

Gracias al trabajo Aditya Mehra (aka aiix) de la Comunidad Mycroft y de otros desarolladores de la Comunidad KDE el Plasmoide Mycroft evoluciona y reibe sus primeras actualizaciones con lo que aseguramos su mejora continua.

Aunque os recomiendo leer el extenso artículo de Aiix aquí tenéis un breve resumen:

• Nueva interfaz de usuario: más acorde con el aspecto general del ambiente Plasma quedando así mejor integrado en el escritorio.
• Mejoras visuales cuando Mycroft está escuchando lo que dices, lo cual es bastante necesario ya que en ocasiones no sabes si lo está haciendo.
• Añadidas sugerencias de interacción con Mycroft.

Y para finalizar, os dejo un vídeo de una demostración del Plasmoide Mycroft que se realizó en la pasada conf.KDE.in 2017.

¿Qué es Mycroft?

El Proyecto Mycroft es una tecnología que nos permite dar órdenes a una «inteligencia» artificial para que realice tareas sencillas como encender o apagar aparatos eléctricos, comunicarnos con nuestro coche, leer nuestra agenda, reproducir nuestras listas de audio o nuestra película preferida e incluso comunicarse con otros Mycroft.

Todo esto se puede realizar mediante un especie de «despertador» de mesita de noche precioso basado en Raspberry Pi que responde a nuestras órdenes y que ya ha superado su propio Kickstarter (recogida de fondos) con éxito.

Como es lógico, utilizará tecnología Wifi (sin hilos) con lo que podrás tener tu casa conectada con diversos Mycroft y ampliar sus posibilidades. Además, ¡es posible utilizar una Raspberry Pi básica para ir probando el proyecto!

Y lo mejor de todo: es un proyecto de Software y Hardware Libre, con lo que las posibilidades son infinitas y solo dependemos del trabajo de las comunidades y su imaginación.

No obstante, y como es normal, lo mejor es ver un vídeo de sus supuestas bondades, las cuales debo confesar una vez más que me han dejado gratamente sorprendido.